Meghan Markle y el misterio de su exclusivo guardarropa
¿Quién realmente cancelaba su exclusivo vestuario? ¿De dónde salían los fondos? Todas estas interrogantes son despejadas finalmente
Por: Cecilia Avilés
Durante el tiempo que Meghan Markle fungió como royal senior de la monarquía británica, tuvo acceso a un impecable guardarropa, valorado según el medio británico Daily Mail, en 30 millones de dólares.
Givenchy, Cartier, Stella McCartney, Dior, Victoria Beckham, entre muchas otras marcas, fueron las elegidas por la duquesa de Sussex para vestir, calzar y accesorizar cada uno de sus looks, con los que derrochaba estilo y elegancia en cada aparición pública.
Además de esto, Markle al contraer nupcias con Harry de Inglaterra se hizo acreedora de un exclusivo joyero, con piezas antiquísimas de la Familia Real. Sin embargo, la duquesa no tardó en complementarla con joyas que ella misma iba seleccionando según su gusto con el paso de los meses.
Lo que también es cierto es que su exclusivo guardarropa no fue un bien adquirido sin fecha de caducidad. Tampoco pagó por el mismo. También es importante destacar que la madre de Archie, renunció a tal privilegio, luego de renunciar a su título nobiliario este año.
Si bien fue la corona británica la encargada de financiar el vestuario de Meghan Markle, recientemente se dio a conocer mayor información a detalle. El encargado de cancelar cada prenda de la duquesa fue su suegro, el príncipe Carlos de Gales, también conocido como el duque de Cornualles.
De acuerdo con reportes del mismo medio británico, en menos de dos años, la duquesa de Sussex superó el costo del guardarropa de Kate Middleton, al optar por prendas más costosas que las que usaba la esposa del futuro rey de Inglaterra.
Sin embargo, tampoco fue el mismísimo Carlos quien pagó directamente todo el vestuario de Markle, lo hizo el Ducado de Cornualles (conformado por su esposa Camila Parker y él) como parte de su apoyo económico a la joven pareja.
El Ducado como tal, cuenta con una cartera de inversiones inmobiliarias y financieras con las que podía cancelar los requerimientos de la duquesa en cuanto a lo que llevaba puesto. Cabe destacar que este valioso apoyo económico, representaba el 95% de los ingresos totales de Markle cuando era royal.
Dentro de las normas reales, Markle no tenía permitido ningún tipo de convenio con marcas, pero posiblemente sí recibió muchos descuentos por las piezas que adquiría de cada firma, quienes resultaban favorecidas por vestir y calzar a la monarca estadounidense.
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